Esta funcionalidad es sólo para registrados
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Hasta el 90 por ciento de los usuarios de pantallas manifiestan distintos síntomas visuales a partir de las cuatro horas de exposición diaria a ordenadores, tabletas, teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos, según recientes estudios científicos. Los oftalmólogos lo han bautizado como «síndrome visual informático» (SVI) y advierten de que puede causar a largo plazo problemas graves en la retina. El doctor Francisco Javier Torres García, coordinador de la unidad de Oftalmología Pediátrica del Hospital Virgen Macarena de Sevilla, asegura que «estos problemas se han agravado muchísimo durante la pandemia porque se han utilizado mucho más los dispositivos, tanto a nivel docente como profesional, y se han duplicado desde entonces las consultas en adultos y un 30 por ciento en niños, donde es más preocupante porque su vista está en desarrollo». El confinamiento y cierre de los colegios durante la pandemia trajo una mayor exposición a las pantallas, un mayor uso de las plataformas «on line»,la anulación actividades aire libre y el aumento del trabajo con visión de cerca, el menos aconsejable para la vista.
Una parte de esta nueva demanda la han absorbido, no obstante, los ópticos, a quienes llegan también cada vez más niños y adultos con problemas de visión a causa de que pasan demasiadas horas delante de una pantalla. «El aumento de consultas postpandemia ha sido una causa muy frecuente de derivación a oftalmología pediátrica y de adultos. Los móviles y las tabletas son probablemente más dañinos para los ojos, no sólo porque su emisión de luz mayor sino por la distancia de exposición«, explica este especialista, que constata, sin embargo, que el brillo de estos dispositivos tiene la virtud de ajustarse a la luminosidad del ambiente.
La exposición excesiva a las pantallas puede hacer brotar en los niños patologías latentes como el estrabismo y otras en la población adulta. Varios estudios cofirman que el teléfono móvil se consulta unas 150 veces al día como promedio por la población general. España es el país europeo con más móviles por habitante (54 millones de aparatos) y el segundo en el mundo por detrás de Singapur, lo cual agrava el problema. «Además, se ha extendido su uso entre la población infantil y casi todos los preadolescentes españoles llevan su móvil por el deseo de los padres de protegerlos y de conocer su situación en todo momento», constata el doctor Torres.
Esta sobreprotección está causando daños ópticos en niños y preadolescentes con la aparición precoz de miopía: «Sin móviles, no aparece antes de los 10 u 11 años, pero ahora nos llegan niños miopes con 6 y 7», constata el oftalmólogo, que confiesa haber visto «en sus alas de espera a niños de 2 años con un teléfono con su cantajuegos cuando está absolutamente desaconsejado que se exponga a los niños a la luz de las pantallas por debajo de los 5 años y sólo una hora con esa edad». A los niños les molesta por este motivo la luz de la calle, donde se encuentran más molestos.
Las pantallas son eficaces y dan mucha información a gran velocidad; y por ese motivo están conquistando cada día nuevos espacios públicos. «Su uso se ha extendido a hospitales hospitales, administraciones públicas y empresas. Es casi una plaga», dice el doctor Torres.
Las pantallas empezaron a popularizarse a partir de los años 60 del pasado siglo, primero por el uso militar, origen posteriormente de Internet. «Hay un cambio de hábitos en los últimos años que es nocivo para la salud visual. Antes se hacían muchas actividades de aire libre y utilizábamos más la visión de lejos que la de cerca. Ahora las distancias son diferentes, se utiliza más la visión de cerca, los hábitos son más sedentarios y todo esto va en contra de nuestra visión«.
El síndrome informático visual empieza con una sintomatología variada (picor, visión borrosa, visión doble, destellos luminosos) que puede derivar en una degeneración macular. «La luz azul puede producir degeneración macular, segun algunos estudios experimentales de laboratorio. Las líneas de investigación actuales estudian el efecto de la luz visible en la retina y sus alteraciones, así como el aumento de la progresión de la miopía de los niños. La prevención de la miopía es importante, puesto que a partir de 6 dioptrías hay riesgos de maculopatías, lesiones maculares; y parece demostrado que el mal uso de las pantallas agrava las dioptrías y lesiones en la retina«, dice el doctor Torres. En su unidad trabajan unos 40 oftalmólogos con una población potencial de más de 525.000 pacientes.
El doctor Torres explica que «la sociedad industrializada ha traído cambios profundos en el entorno de los seres humanos desde hace dos siglos. En la preindustrialización predominaba trabajos al aire libre, mayor actividad física, mayor exposición solar y uso predominante de visión lejana, mientras que en la actualidad ha cambiado nuestro estilo de vida con trabajos en entornos cerrados, con menor actividad física, mayor exposición a luz artificial,uso masivo de PVD con intensa actividad de cerca«.
En la actualidad el 90% de los trabajos requieren el uso de pantallas de visualización de datos para recoger y procesar información con distintas necesidades según el entorno de trabajo, además de otras actividades relacionadas con la docencia o el uso recreativo y entre el 64% y el 90% de los usuarios manifiestan distintos síntomas con el uso de mas de 4h de uso de pantallas. Un 65% de niños en educación infantil usan móvil; un 69% de niños en educación primaria.
El síndrome visual informático (SVI) se define como el conjunto de síntomas asociados al uso prolongado de la PVD (+ de 4h) y pueden síntomas oculares oculares, astenopía (cansancio visual con visión borrosa) ,fobia a la luz,sensación de moscas volantes, dolor de cabeza y diplopía (visión doble), además de molestias posturales, dolor de cuello o lumbalgias.
También produce el empeoramiento de los procesos que afectan a la superficie anterior del ojo como ojo seco, blefaritis y conjuntivitis, además de un mayor desarrollo de la miopía. El mayor número de horas semanales trabajando de cerca (demanda acomodativa-enfoque de cerca) así como la reducción de horas de actividad al aire libre, aumenta el riesgo de aparición de miopía en un 80%, según los diferentes estudios epidemiológicos sobre la miopía. Disfunciones binoculares (descompensación de estrabismos previos), y alteraciones acomodativas (exceso o defectos de enfoque en la visión cercana) son sus efectos pricnipales.
El tratamiento del síndrome visual informático contiene una parte preventiva de concienciación de los usuarios de pantallas. Para PVD grandes (PC de sobremesa) se recomienda la regla 20-20-20: cada 20 minutos mirar de lejos 20 segundos a 20 pies (6 metros).
Para PVD tablets y móviles, se recomienda la regla 30-40-50: cada 30 minutos mirar de lejos 40 segundos a 50 pies (15 metros)
También se desaconseja el uso de pantallas 2 horas antes de dormir porque altera ritmo circadiano y la secreción de melatonina que induce el sueño por la disminución de la luz ambiental. Es imporante la ergonomía del puesto informático y que el borde superior de la pantalla esté a la altura de los ojos. Se recomienda aumentar el carácter de las letras y disminuir el brillo de la pantalla.
Un ensayo clínico aleatorio ha probado que los filtros de luz azul que se encuentran actualmente en el mercado no reducen la fatiga visual producida por las pantallas, aunque existen factores intrínsecos propios de cada persona como problemas de visión preexistentes (errores refractivos, disfunciones binoculares, acomodación o lentes correctoras adecuadas) que necesitarán de consejo profesional.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Lo más leído en Sevilla
Las 15 recetas al horno más sencillas
10 trucos de cocina (que impresionan) para facilitarnos la vida
La infusión que ayuda a dormir mejor y adelgazar durante la noche
Tu mensaje se ha enviado con éxito
Tu mensaje se ha enviado con éxito
Muchas gracias por tu participación